domingo, 22 de julio de 2018

Reseña | El Príncipe de los Cuatro Vientos - Joseph Michael Brennan

Ficha Técnica:
Título: El Príncipe de los Cuatro Vientos
Título Original:
Autor: Joseph Michael Brennan
Serie: Las Memorias del Juramento #2
Editorial: Montena - Me Gusta Leer Chile
N° de páginas: 460

Sinopsis:
El Príncipe de los Cuatro Vientos es el segundo libro de la trilogía fantástica Las Memorias del Juramento de Joseph Michael Brennan. En esta segunda parte y luego de la batalla de Isla Blanca, Tarian se ha convertido en El Príncipe de los Cuatros Vientos, aunque el trono sigue en manos del general Galkirion. Mientras avanza en su camino como aprendiz del Juramento, Tahmuz deberá ayudarlo a reunir bajo su estandarte a las demás ciudades.

Como en las mejores novelas de aprendizaje, los jóvenes deberán enfrentarse a diversos retos que van a poner a prueba su valentía, desafíos que fortalecerán su carácter gracias a la severidad y sabiduría de su protector.

Opinión:

Y  seguimos con esta maratón de reseñas dedicadas a la trilogía ‘Memorias del Juramento’. Es el turno del segundo libro que como les comenté en mi reseña anterior empecé inmediatamente después de terminar el primer libro.  

- Desde ya están advertidos, hay spoilers del libro anterior -

Cuando comencé El Príncipe de los Cuatro Vientos estaba preparada para ver a Tarian, Tahmuz y compañía tratando de unificar a la República en contra  de las maquinaciones de su principal enemigo, Galkirion. Sin embargo, grande fue mi sorpresa al encontrarme con un nuevo personaje narrando una trama muy distinta…una trama de un pueblo con una cultura totalmente diferente a lo que conocíamos y que se desarrolla a bastante distancia de donde nos encontrábamos al final de Las Cenizas del Juramento.

El primer capítulo del libro tiene como protagonista a Ataru, un semidios de la casa de las espinas a punto de cumplir quince años quién nos narra el día en que conoció a Mancha, una niña salvaje que cambia para siempre su vida. Desde aquél entonces han pasado varios años y Ataru se enfrenta al desafío más esperado y temido al mismo tiempo, debe superar el ritual mediante el cual se convertirá un dios, pero este no sabe si es capaz de pagar el precio requerido para completar tal hazaña.

Este libro se compone de capítulos que alternan entre dos realidades muy diferentes, por un lado tenemos la empresa del Príncipe de los Cuatro Viento mientras trata de volver al trono que legítimamente le corresponde, así como también del entrenamiento de Tahmuz para convertirse en un Juramentado con todas las de la ley.

No obstante, fueron los capítulos de Ataru los que me cautivaron totalmente, la inclusión de este personaje que nos retrata de vida de una nación mítica, temida y venerada al mismo tiempo, fue lo mejor de este libro y lo que elevó la trilogía de una historia ‘típica’’ a algo totalmente diferente. Los Assurana ya habían sido mencionados con anterioridad, se hablaba de ellos con el temor propio que nace de lo desconocido, por eso me pareció tan acertado que el autor incluyera un personaje de esta misma nación que nos narrara lo que implica pertenecer a una cultura guerrera tan diferente. Es acá donde se unen los frágiles hilos que aparecieron en ‘Las Cenizas del Juramento’, para mostrarnos la verdadera historia  que pretende contarnos esta trilogía, una historia que inicio décadas antes con la aparición de la mítica Bestia en las tierras del Sur.  

Los Assuranna son una nación cuya historia se cimienta en la guerra y la sangre, pero no solo eso, además de ser expertos guerreros estos disfrutan cultivando su mente por medio del arte. Suena bien, no obstante los así llamados semidioses deben perseguir, dar muerte y consumir la sangre y carne de uno de sus seres queridos en la víspera de su décimo quinto cumpleaños para poder convertirse en dioses. También consideran a los ‘humanos normales’ (toda la república y los pueblos que los habitan) como bestias, seres inferiores que no pertenecen a la misma raza y por ende presas, y las mujeres son meros objetos estratégicos en sus guerras políticas que pueden aportar conocimiento y herederos, nada más.

Desde el primer capítulo que leí desde su perspectiva simpaticé con Ataru, me pareció un personaje mucho más complejo que Tarian o Tahmuz y su conflicto interior me tenía completamente cautivada. Ataru nació como el segundo hijo de Asur-Tharisag, uno de los dioses más importantes y fuertes de su raza. Sin embargo, nunca ha podido estar a la altura de la reputación de su padre o de su hermano, al contrario, tiene que luchar constantemente en contra de la ‘debilidad’ en su interior. A pesar de ello hay dos personas en las que Ataru confía con su vida, una de ellas es Mancha, su amada esclava. Y el otro es Razen, su hermano.

Acá quiero hacer un stop y hablar de Razen, un personaje que me intrigó desde el inicio por el profundo amor que profesa por su hermano menor a pesar de ser un ‘dios’  y haber borrado todo tipo de debilidad de su cuerpo. No solo eso me llamó la atención, sino que Razen tiene un compañero llamado Kiran, y esa relación fue una de mis cosas favoritas en el libro, no por el tema de la ‘inclusión’, sino porque desde hace años me preguntaba porque todos los libros de fantasía épica tenían que ser tan heteronormados, cuando a lo largo y ancho del mundo se han dado un montón de tórridos romances entre guerreros. Uno de los ejemplos más conocidos y representativos en la cultura popular es el de Ricardo Corazón de León, un gran guerrero que prefería la compañía masculina. Según la cultura Assunara, dos guerreros pueden tener un vínculo llamado Kaizjan, compañeros, guerreros, amantes y amigos, y esto nada tiene que ver con tomar una esposa y tener descendencia.

Razen y Kiran son personajes complejos, no son ‘buenos’, no creo que podamos decir eso de ningún integrante de la cultura Assunara, pero el caso es que no son buenos según nuestros estándares, porque según los de ellos son seres intachables que representan la perfección de su raza, de hecho el vínculo entre Razen y Kiran es legendario, y material de poemas y baladas románticas entre su gente, así que bravo por esta maravillosa historia que incluyó Joseph.

A medida que vamos ahondando en la historia de los Assurana y Tarian se acerca más a su objetivo de recuperar el trono sus caminos comienzan a entrelazarse, las situaciones en ambos lados se vuelven muy intensas, las rebeliones y revelaciones llegan a un punto culmine en el que sabemos que se acerca una guerra y no sabemos cómo detener lo que se viene. En su totalidad el libro es muy intenso, pero las últimas 150 páginas son increíbles, ahora veo porque Cenizas del Juramento me parecía incompleto, aún faltaba la mitad de la historia y ¡vaya qué historia!

En cuanto a los personajes, Tahmuz y Tarian siguen siendo jóvenes que tratan de aprender y luchan por sus ideales heroicos con gran determinación. Me gustan mucho sus personajes, pero al lado de Ataru y su nación desluce un poco su historia. En este libro también tenemos una reivindicación de los papeles femeninos, por fin se les da un poco más de prioridad y quiero destacar a algunos de estos personajes.  Por un lado tenemos a Ilona, viuda de Kharvan y madre de Tarian, una excelente estratega que se maneja en diplomacia. Luego tenemos a la Dama Ebimu, madre de  Ataru, y una mujer astuta que se desenvuelve en intrigas políticas de manera despiadada, definitivamente me encantó su frialdad y contención. Aisha es un personaje del que vimos muy poco, pero me encantó su intervención en la historia, ella está rodeada de misterio y espero grandes sorpresas de su parte en la siguiente entrega.

Para terminar esta reseña, El Príncipe de los Cuatro Vientos superó todas las expectativas que podía tener acerca de la historia, esta avanza y se hace más compleja, más rica y completa. La falta de intensidad o de ‘sabor’ de la primera entrega se compensa con creces y los invito a todos a darle una oportunidad a estos maravillosos libros.

Luego de terminar este libro comencé inmediatamente ‘La Sangre de los Dioses’ porque no podía esperar para saber qué sucedía luego del final tan infartante del libro, así que atentos a la próxima reseña :)

¿Conocían el libro? ¿Lo han leído?
¡Por mi parte se los recomiendo mucho!
Muchas gracias por leerme, besos y abrazos n.n

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