Título Original: Capturing the Devil
Autor: Kerri Maniscalco
Serie: A la Caza de Jack el Destripador #4
Editorial: Puck - Ediciones Urano
N° de páginas: 576
Y finalmente ha llegado a nuestro país la
esperada conclusión de la saga A la Caza de Jack el Destripador de Kerri
Maniscalco, A la Caza del Diablo, un libro que continua inmediatamente donde lo
dejó el libro anterior, Audrey Rose y Thomas acaban de llegar a Estados Unidos
y un asesino apodado el Diablo Blanco cuyo método es muy similar al de Jack el
Destripador está sembrando el caos en Chicago ¿será una coincidencia o ambos
casos estarán relacionados?
Siento que esta saga para mí fue de menos a
más, a lo mejor me acostumbré a los personajes y a la manía de la autora de
no construir mucho sus libros más allá del caso, pero sin duda este destaca
como mi libro favorito de la saga. En este el equilibrio entre el caso y el
romance es más notable que nunca, la relación entre Audrey Rose y Thomas avanza
al siguiente paso, pero entre tanto caos e incertidumbre surgen nuevos
problemas entre ambos que vienen de un antiguo compromiso, un desafío difícil
de superar.
Mientras tanto el caso del Diablo Blanco los
lleva hasta al tenebroso Hotel del Asesinato, y es acá donde deberán superar la
verdadera prueba ya que se enfrentarán no solo a un asesino notable sino que a
situaciones que creían que habían superado, es acá donde los acontecimientos de
los libros anteriores cobran nueva relevancia y se cierra el círculo,
particularmente me gustó mucho la conexión al primer libro, a lo mejor es un
tanto débil y forzado, pero tiene sentido y lo disfruté mucho.
Tanto por el caso como por el romance, no pude
soltar el libro y me lo leí en tiempo record, no se me hizo pesado como los
anteriores y disfruté del drama, ya sea porque los personajes presentaran
desarrollo (que lo dudo) o porque me acostumbré a ellos (creo que es esto). Las
descripciones de los asesinatos y todo lo relacionado a estos me pareció más
tétrico en este libro que en cualquier de los anteriores, creo que todo en este
libro brillaba como más fuerza y se sentía más genuino, tal vez por eso fue una
lectura tan amena.
Y para cerrar la historia con broche de oro,
reconociendo que el final del libro es cliché, muy rosa y amado, de la
editorial decidieron incluir el relato exclusivo ‘Convertirme en el Príncipe
Oscuro’ de Thomas Cresswell, una opción acertada en mi opinión porque como
lectores siempre queremos saber el punto de vista de la otra persona que
compone la pareja.
Así que en mi caso, si bien no amé la saga en
su totalidad, si disfruté mucho de este cuarto tomo y como se desarrollaron las
cosas, realmente aprecio que la autora intentara darle un cierre a lo comenzado
con el primer libro y nos llevara casi en un viaje de la nostalgia por las
aventuras de Audrey Rose y Thomas Cresswell.
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