Título Original: The Last Ever After
Autor: Soman Chainani
Serie: La Escuela del Bien y del Mal #1
Editorial: Puck - Ediciones Urano
N° de páginas: 635
Este mes tenía como meta leer un libro que
había estado posponiendo desde hace mucho y finalmente lo he logrado, ‘El Último
para Siempre’ es tercer libro de la saga La Escuela del Bien y del Mal de Soman
Chainani, y con el cual acaba el primer arco de esta historia. Es absurdo, pero
una de las razones de posponer tanto esta lectura era por el peso de mis
expectativas, no obstante, y a pesar de que sentí muy pesadas las primeras 100
páginas, después de eso pude enganchar y no lo solté hasta acabarlo.
El libro comienza en el mismo punto que lo deja
en el anterior, Agatha y Tedros volviendo a Gavaldon mientras Sophie toma su
lugar junto al director, Rafal, su verdadero amor, pero el Cuentista aún no
comienza una nueva historia, esto significa que alguna de las parejas aún duda
de su final, mientras más se posponga el final definitivo del cuento el sol
seguirá desapareciendo y amenazando la supervivencia del mundo.
Las primeras cien páginas que tanto me
constaron avanzar son un resumen de lo perdido y lo ganado y el lugar en el que
se encuentran ahora los personajes, Agatha quiere un final feliz con su príncipe
en Gavaldon, Tedros quiere volver para matar al villano, Sophie aún no acepta
del todo a su amor verdadero y Rafal espera por la decisión de esta, cuando
finalmente los personajes aceptan los verdaderos deseos de sus corazones
comienza la historia con Agatha y Tedros volviendo a las escuelas para rescatar
a Sophie y acabar con Rafal.
No obstante, no contaban con el hecho de que ahora que el mal tiene a su reina se les han dado segundas oportunidades a todos los villanos que fueron derrotados en cuentos anteriores, y quienes no están dispuestos a volver a cometer los mismos errores. Sophie por otro lado quiere creer que por fin ha encontrado su amor verdadero, su final feliz, pero su corazón sigue dudando debido a su antiguo amor, cuando abrace su maldad interior se le ofrecerá una nueva oportunidad de probar quién es su pareja real ¿Seguirá cometiendo los mismos errores de siempre?
Sophie fue un punto central en esta novela y es
que la mayoría de las cosas que suceden acá se podrían haber evitado si no
fuera por ella, la constante indecisión y la negación a reconocer su egoísmo y narcisismo
solo sirven para poner en énfasis su afiliación al mal, lo mismo que su falta
de empatía, sinceramente hasta el final no vi ninguna característica redimible
en Sophie, excepto su vínculo con Agatha que desde mi perspectiva no es
suficiente.
Por otro lado, Agatha vuelve a caer en
inseguridades antiguas pero todo tiene una razón de ser, ella y Tedros no han
tenido oportunidad de evolucionar dentro de sus roles como pareja, y si bien
los finales felices y el amor verdadero son fáciles en los cuentos de hadas,
tampoco son reales y es ahí donde viene
la reflexión a las nociones preconcebidas del amor, lo correcto o el felices
para siempre.
Tedros es un personaje que en los primeros
libros me desagradaba o era indiferente, en el inicio de este libro pensé que
nuevamente iba para el mismo lado, pero en realidad me sorprendió con la
firmeza de sus convicciones y sentimientos, sigue siendo un personaje muy
infantil y testarudo, pero ahora también veo características positivas en él.
El juego con el antagonista es bastante simple,
el bien contra el mal, pero en este caso ya en la última fase ¿Qué significa el
felices para siempre? ¿Qué estás dispuesto a sacrificar para obtenerlo? La
presencia de los personajes secundarios nuevamente no es solo circunstancial sino
que profundiza la trama, las tres brujas del mal lideradas por Hester son de
los mejores personajes de la saga, Merlín, que fue un nuevo personaje, también
fue bastante interesante. Amé con locura el consejo de los trece, me pareció
muy cómica la forma de presentarlos del autor. Y Lady Leso también es un gran
personaje.
Al final del día estos libros siguen siendo un
retelling satírico de los cuentos de hadas y las lecciones de estos, el autor
acá en lugar de solo presentar el bien vs el mal nos enseña que de la
convivencia de esta dualidad depende el mundo de los personajes, un tema que
también podemos extrapolar a la vida real y es que las cosas no se dividen en
blanco y negro.
Quedé conforme con el final a pesar de que me descoloca que a X personaje no se lo castigara por todo el mal que causó, independiente de que fuera parte de una especie de equilibrio. Aun así entiendo que ese no es el punto del libro, ahora solo estoy ansiosa de ver que es lo que nos traerá el autor en el siguiente arco de la saga.
¡Hola, hola!
ResponderEliminarQue genial que hayas disfrutado de la historia, espero que siga así con el siguiente. Yo no los he leído ni me llaman mucho la atención tampoco, pero estaré atenta a tu reseña :3
¡Besos!