Título: Todos Estamos Hechos de Estrellas
Título Original: We Are All Made of Stars
Autor: Rowan Coleman
Serie: Autoconclusivo
Editorial: Umbriel - Ediciones Urano
N° de páginas: 320
Título Original: We Are All Made of Stars
Autor: Rowan Coleman
Serie: Autoconclusivo
Editorial: Umbriel - Ediciones Urano
N° de páginas: 320
Sinopsis:
• Para los fans de Jojo Moyes y John Green.
• Una historia esperanzadora que nos hará creer en las segundas oportunidades. Tras la enfermedad o la pérdida siempre se puede volver a empezar.
¿Qué pasaría si tuvieras la oportunidad de escribirle una carta de despedida a la persona que amas?¿Qué le dirías?
Stella Carey tiene buenos motivos para aceptar el turno de noche en el hospital donde trabaja. Casada con un veterano de guerra que ha regresado de Afganistán brutalmente herido, Stella se refugia cada noche en su trabajo, mientras su esposo Vincent se encierra en casa, incapaz de dormir debido al estrés postraumático que padece. Stella Carey escribe las cartas que le dictan sus pacientes para sus seres queridos (algunas llenas de humor, de cariño y consejos prácticos; otras, impregnadas de arrepentimiento), con la promesa de echarlas al correo después de su muerte. Hasta que una noche escribe una carta que podría dar a su paciente una última oportunidad de redención, si la entrega a tiempo.
Opinión:
A veces me dan ganas de leer libros para llorar ¿Les ha pasado? Y cómo
soy llorona no se necesita mucho para tenerme sufriendo, así que cuando vi que
llegó a Chile Todos Estamos Hechos de Estrellas, con una sinopsis triste y una
recomendación para los fans de Jojo Moye, pensé que podía ser una buena
lectura. Pero lo aplacé mucho tiempo, llegué a arrepentirme de haberlo pedido
en colaboración, afortunadamente en la editorial fueron super comprensivos y me
dieron todo el tiempo que necesitara para leerlo y se los agradezco un montón
porque fue una lectura maravillosamente triste que disfruté desde el inicio.
El libro sigue los puntos de vistas de tres personajes, en primer lugar
tenemos a Stella, una traumatóloga que trabaja en un centro de cuidados
paliativos, este es un trabajo que tomó luego de que su esposo volviera herido
y mutilado de Afganistán, con la pérdida de su pierna ambos perdieron el
sentido como pareja, un proceso doloroso que Stella no sabe cómo arreglar, por
lo tanto lo evita. Sin embargo, nadie en el centro sabe por lo que pasa Stella,
para ellos es una roca inamovible siempre dispuesta a ayudar y a escuchar, también
es quién les ofrece escribir una última carta a uno de sus seres queridos para
cuando ya no estén más aquí.
Hope es una joven de veintiún años que padece que fibrosis quística,
su enfermedad a definido gran parte de su vida y amistades, y lo cierto es que
a pesar de que por su enfermedad Hope debe tomar ciertas precauciones, nada le
impide realmente intentar una vida real fuera de la espera a cuando le llegue
el momento. Una de las luces en su vida es su mejor amigo Ben, un chico
extrovertido que se desvive por ella y le recuerda lo que es vivir realmente.
Por último, tenemos a Hugh, un hombre de treinta y cinco años con una vida hecha y feliz, soltero empedernido le cuesta establecer relaciones sentimentales duraderas y no por infidelidad, sino porque se lo considera frío. No obstante eso no preocupa a Hugh, tiene su casa, un trabajo que le agrada, comida congelada y un gato indiferente. Todo cambiará cuando una joven madre soltera y su hijo se muden a la casa del lado, Hugh comenzará a darse cuenta que lo ‘tiene todo’, pero no lo hace realmente feliz, y tendrá que enfrentarse a los traumas de su pasado relacionados con su madre.
Por último, tenemos a Hugh, un hombre de treinta y cinco años con una vida hecha y feliz, soltero empedernido le cuesta establecer relaciones sentimentales duraderas y no por infidelidad, sino porque se lo considera frío. No obstante eso no preocupa a Hugh, tiene su casa, un trabajo que le agrada, comida congelada y un gato indiferente. Todo cambiará cuando una joven madre soltera y su hijo se muden a la casa del lado, Hugh comenzará a darse cuenta que lo ‘tiene todo’, pero no lo hace realmente feliz, y tendrá que enfrentarse a los traumas de su pasado relacionados con su madre.
En
general estos tres personajes no tienen mucha interacción entre sí, Stella
conoce a Hope y Hugh, pero a lo largo del libro cada uno de ellos se enfrenta a
un viaje en solitario para descubrir sus verdaderos sentimientos en relación a
ciertas situaciones y personas, aprenderán del duelo, la perdida, el desengaño
y la curación.
El libro en general es precioso, hay drama pero no es del
tipo exagerado sino que relata hechos cotidianos de personas que tuvieron que
pasar por eventos traumáticos y me gustó mucho el trato que se le da a estas
situaciones. La historia conserva un muy buen ritmo a pesar de que vamos
alternando entre los tres puntos de vistas de personajes muy diferentes con
situaciones nada similares, pero que al fin y al cabo comparten algo, además de
un gato que tiene múltiples identidades.
Cómo les comenté anteriormente, Stella escribía la carta final de uno de sus pacientes terminales y luego la enviaba al familiar elegido para que la leyera, antes de cada capítulo podíamos leer una de esas cartas y me dejaban destrozada, no relataban grandes historias, solo expresaban el más sincero amor por medio de pequeñas vivencias de una vida compartida o en algunos caso, una vida que no alcanzó a ser.
Dentro de su simpleza es un libro muy intenso, todos los personajes tienen un gran desarrollo y se enfrentan a la muerte de una forma u otra pero el problema no es enfrentarse a esta sino a cómo lidiar con las consecuencias de perder a un ser querido, finalmente cada uno de los personajes llegan a un acuerdo consigo mismo acerca del tema y es bastante liberador y doloroso, pero necesario.
Cómo les comenté anteriormente, Stella escribía la carta final de uno de sus pacientes terminales y luego la enviaba al familiar elegido para que la leyera, antes de cada capítulo podíamos leer una de esas cartas y me dejaban destrozada, no relataban grandes historias, solo expresaban el más sincero amor por medio de pequeñas vivencias de una vida compartida o en algunos caso, una vida que no alcanzó a ser.
Dentro de su simpleza es un libro muy intenso, todos los personajes tienen un gran desarrollo y se enfrentan a la muerte de una forma u otra pero el problema no es enfrentarse a esta sino a cómo lidiar con las consecuencias de perder a un ser querido, finalmente cada uno de los personajes llegan a un acuerdo consigo mismo acerca del tema y es bastante liberador y doloroso, pero necesario.
Para finalizar, Todos Estamos Hechos de Estrellas es una
novela conmovedora acerca del duelo y la perdida, que plantea diferentes
situaciones acerca de cómo nos enfrentamos a esta, con personajes carismáticos
que tienen un gato en común y tristes vivencias, una lectura dulce y
realista.
Muchas gracias a Ediciones Urano por el ejemplar
¿Conocían el libro? ¿Lo han leído?
¿Les llama la atención?
Muchas gracias por leerme, besos y abrazos n.n
No hay comentarios:
Publicar un comentario